Descubrí que en las noches mi pokmon sale a ver la luna, aproveche su momento filosófico para preguntarle sobre su desventura. Entonces aflojo (la información), me conto de su paso por el mar de la desesperación; caerse en el abismo del aburrimiento; ser perseguida por las bestias de la incertidumbre; llegando a las costas del desinterés; hasta encontrarse en medio del valle de la neurosis (que fue donde la encontré).
Por fin me conto su gran preocupación: el encontrarse con las muchas cosas que no ha hecho y todas las dificultades por venir. Pobre pokmon ya se contentará cuando, por que yo la voy a cuidar y vamos a cruzar todas esas dificultades y más juntos.
Por cierto su viaje tuvo cosas buenas, se le nota en las piernas y en otros lados. Lados que por cierto la censura pokmon me tacho y ya no puedo seguir describiendo cómo sé que es mi pokmon. Ya ven como no hay libertad de expresión.
jjajajajajajjajajaajajaj
ResponderEliminarTambien tiene una buena pierna
:D